Liam emerge en Máquinas y memorias: el amanecer de la IA como un detective atrevido y apasionado por la tecnología, cuyo amor por Emma es tan profundo como inesperado. A lo largo de la novela, se embarca en investigaciones que desafían los límites, impulsado por una sed insaciable de conocimiento y una valentía que a menudo ignora las posibles repercusiones. Sin embargo, su viaje le lleva a una revelación que cambia su existencia.
En Máquinas y memorias: el despertar de los recuerdos, Liam vuelve a la trama de maneras que nadie esperaba. A pesar de que Emma desconoce inicialmente su regreso, el reencuentro de los dos personajes, después de décadas, es un momento crucial. Su relación, marcada por el amor y la pérdida, queda suspendida en un delicado equilibrio, dejando a los lectores en vilo hasta la tercera entrega de la saga.