Klaus, introducido en Máquinas y memorias: el despertar de los recuerdos, es una figura envuelta en misterio, cuya influencia se siente profundamente en un capítulo crucial de la vida de Valeria. Reconocido como uno de sus proveedores de información más confiables, opera en las sombras del oscuro mundo de Berlín, esculpido por la Gran Recesión, donde la información es el bien más preciado y él es un maestro en su comercio.

Aunque Klaus no es un hombre de estatura desmesurada, su presencia es imponente, capaz de dominar cualquier espacio con su mero ser. Su llegada se presiente, creando una atmósfera cargada de expectativa y respeto. Este hombre misterioso, con su conocimiento vasto y conexiones profundas, se convierte en un pivote sobre el cual gira el destino de Valeria.

Una sola decisión de Klaus tiene el poder de cambiar el curso de los eventos, subrayando su papel como un jugador clave en el complejo tejido de la sociedad de Berlín. A través de Klaus, El despertar de los recuerdos explora los matices del poder, la influencia y el valor incalculable de la información en un mundo en constante cambio.